Según el último Barómetro sobre el Comercio de Bienes de la OMC, el crecimiento del comercio se debilitará probablemente en los últimos meses de 2022 y a principios de 2023. Los índices de transporte marítimo de contenedores (99,3) y de materias primas (97,6) terminaron sólo ligeramente por debajo de la tendencia, perdiendo impulso. La principal excepción es el índice de productos de automoción (103,8), que subió por encima de la tendencia debido a la mayor venta de vehículos en Estados Unidos y al aumento de las exportaciones desde Japón.
En definitiva, el barómetro indica que la economía mundial sigue afrontando fuertes vientos en contra. El actual valor de 96,2 es inferior al valor de referencia del índice y al indicador anterior de 100,0, lo que refleja la contracción de la demanda de bienes objeto de comercio.
De este modo, el índice del barómetro ha caído por debajo del índice del volumen del comercio de bienes, que muestra la evolución real del comercio hasta el segundo trimestre. Se espera que continúe a la baja una vez que se disponga de las estadísticas comerciales trimestrales del segundo semestre de 2022. La reciente divergencia entre los índices, observada en 2021 y 2022, podría explicarse por los retrasos en los envíos de bienes derivados de las interrupciones de la cadena de suministro desde la pandemia.
Además, el descenso del barómetro de bienes es coherente con las previsiones comerciales de la OMC del 5 de octubre, que preveían un crecimiento del volumen del comercio del 3,5% en 2022 y del 1,0% en 2023, debido a varias perturbaciones relacionadas como la guerra de Ucrania, los altos precios de la energía y el endurecimiento monetario de las principales economías.
En detalle, el comercio de bienes registró un aumento interanual del 4,7% en el segundo trimestre, tras crecer un 4,8% en el primero. Para que se cumpla la previsión, el crecimiento del comercio tendría que situarse en una media del 2,4% interanual en el segundo semestre de 2022.
Además, el índice del barómetro se vio lastrado por las lecturas negativas de los subíndices que representan los pedidos de exportación (91,7), el transporte aéreo (93,3) y los componentes electrónicos (91,0). En conjunto, estos índices sugieren un enfriamiento de la sensación empresarial y una menor demanda de importaciones a nivel mundial.
Con información de mundomaritimo.cl.
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